lunes, 8 de diciembre de 2008

Los Fabulosos Cadillacs presentaron en Córdoba su gira “Satánico Pop Tour”

Unas 18.000 personas se concentraron en el Estadio Mundialista Córdoba para presenciar el retorno de la banda con su gira “Satánico Pop Tour – Yo te avisé!”.
Eran las 21:35 cuando la banda pisaba el escenario (35 min después de lo programado).
Con la energía que la caracteriza, la banda descargó a tierra con un recital intenso y pleno de hits, que sirvió de presentación de su disco de regreso, “La luz del ritmo”.
Las figuras de los tres "al frente" del grupo: Gabriel “Vicentico” Fernández Capello (voz), Flavio Cianciarulo (bajo) y Sergio Rotman (saxo), junto con las de Mario Siperman (teclados) Daniel Lozano (trompeta) y Fernando Ricciardi (batería) se recortaron solemnes sobre el escenario con el tema de James Bond como telón de fondo.
Luego de esta Intro, arrancaron con todo, pregonando el regreso del “León del Rock”, a través de un clásico, como “Manuel Santillán, El León”, curiosamente, el tema cuando estaba en sus acordes finales, una baja de tensión en uno de los grupos eléctricos que alimentaban el sonido, repentinamente dejo de funcionar, por lo cual Vicentico pidió disculpas y cinco minutos de espera.
Superado el inconveniente, arremetieron con otro hit añejo “Mi novia se cayó en un pozo ciego”, el cual ya arrancaba el pogo y también el baile.
“Carmela” fue el siguiente, el cual también fue muy coreado y bailado, posteriormente le siguieron “Estoy harto de verte con otros”, el aclamado “Genio del dub” y “Wake up and make love with me”, un cover de “The Blockheads”.
Por fin, Vicentico saludó al publico cordobés diciendo: “estamos felices de estar con ustedes, con nosotros y por este regreso” , y nos invitó a bailar, Rotman parece niño, corre, salta, canta, sale en pantallas, al igual que Flavio con su bajo a cuestas.
Luego siguieron los temas “Muy, muy temprano” (re-versionada en su último CD), “El aguijón” y “Paquito”, aquí fue donde el baile y los coros disminuyeron, ya que éramos pocos los que nos dimos cuenta de los temas que eran interpretados, pero si hay alguien que sabe como levantar y ganarse al publico, son justamente ellos, que tras un parate, era un misterio como seguiría todo, lo cierto es que a lo lejos, sobre el escenario se veía un teclado de colores alucinantes, que deslumbraban hasta la ultima fila, se hacia presente Pablo Lezcano, el “príncipe de la cumbia” como lo presento Vicentico, había llegado para tocar la nueva y excéntrica versión super-cumbiera de “Padre Nuestro”, no sin antes otra pequeña apostilla, Flavio, se enredó con el cable del mic de Vicentico, el cual terminó en el suelo, escuchándose un estruendoso “¡PUM!” en todo el sistema de audio.
Este hecho, pasó tan rápido al olvido cuando arrancó el tema, y quedo claro que si alguien puede pasar del ska, al disco, luego a un reagge, seguir con algo de rock y aterrizar en una cumbia, son los Cadillacs y como ellos, nadie.
Tras dicho tema, siguieron con “Saco azul”, la cual le faltó algo de poder, o sentimiento, pero, sin dudas, el momento mas emotivo del show se iba acercando, primero con una excelente versión de “Siguiendo la Luna” ; Una nueva versión, que sonaba mas nostálgica, mas oscura, mas poderosa, me emociono mas de lo que esperaba, mas aún, con la verdadera Luna en fase de cuarto creciente, que acompañaba la noche y se hacía presente, mas allá de la que se veía en las pantallas..
Sin dudas que el momento de mayor emoción, incluso hasta las lágrimas, fue cuando la banda recordó al fallecido Gerardo Toto Rotblat, interpretando "Los condenaditos", mientras en la pantalla gigante se reflejaban viejas imágenes del percusionista.
Ésta era una re-versión, aun mas lenta que comienza muy al estilo “Me gustas tu” de Manu Chao y Vicentico golpeaba el teclado con su bastón, “dispara tormenta” que retumbaban por todo el lugar. Las pantallas ya también eran parte del show mostrando soldados de juguete.
Las luces se apagan y en las pantallas se ven imágenes de Toto, haciendo lo que mejor sabia hacer, tocar las percusiones, entonces entran dos muertes vestidas, una de rojo y otra de negro; comienzan a recorrer el escenario y se empiezan a llevar a cada uno de los integrantes, unas sombras se ven por la estructura del escenario, las percusiones suenan cada vez mas bajo dando paso a la canción que da titulo a su nuevo disco.
Así fue que Vicentico anunció el tema “La luz del ritmo”, el cual levantó al publico nuevamente, todo era un sube y baja en las emociones, en los ritmos y “V Centenario” volvía a prender a la banda, la cual luego siguió con “Calaveras y diablitos”.
El baile, la fiesta y el ritmo a full nos atrapó a todos con los hits “Gitana”, “Carnaval toda la vida”, “Demasiada presión” y “Mal bicho”, en su versión original, cerrando el show, con uno de los temas que mas ganas tenía de escuchar como “El satánico Dr. Cadillac”, les aseguro que no recuerdo haber bailado y saltado tanto en un recital, pero la fiesta que se vivía, era demasiado contagiosa como para ignorarla.
Era obvio que todo no finalizaría aquí, ya que se venían los bises, con su armónica en mano Vicentico comienza con “Basta de llamarme así”, la ultima re-versión del nuevo disco, a la cual la armónica le dio un toque especial, el festejo se convirtió en coros,... abrasados y cantando.
Tras esto, siguieron con “Gallo rojo”, una nueva versión de “Vos sabes”, que mostraba a monitos bebés en las pantallas, para luego darle paso a todo un clásico y marca registrada de la banda con “El matador”.
En la segunda y última parte de los bises, invitaron a Mimí Maura al escenario y otra vez todo fue la locura con la versión de “Vasos vacios”, un pequeño detalle, no notado por muchos, si por quien les comenta; es que Mimí Maura, comenzó a cantar la parte que le tocaba a Vicentico, se dió cuenta rápidamente de ello, y después, si cantó la parte que le tocaba cantar, obviamente, salvo este pequeño detalle, la versión fue excelente.
Acto seguido, regresa Flavio y presenta al nuevo invitado, Astor, su hijo “con apenas 11 fabulosos añitos”, que no se amedrentó para nada ante las 18.000 personas que lo mirábamos, y arrancaron con “Guns of Brixton”, si alguna canción pensé que no escucharía y menos con el “Sr. Vainilla” y “Astorboy Mini Moon” (mmm... así le puso Flavio) era esta, otro cover de The Clash, la verdad, sonó aplastante., otro cover fue ”Let's lynch the landlord”, un cover de los Dead Kennedys, aunque fue una versión corta.
El final inevitablemente se aproximaba y finalmente el pedido de todos se cumplía, ya que durante todo el show, gran parte de la gente que estábamos en el campo coreábamos el clásico “Ooh, Oooh, Oooooh!!!”, el coro de el gran cierre con “Yo no me sentaría en tu mesa”, el mas esperado, el mas pedido, el mas cantado, bailado y aplaudido de la noche.
Tras dos horas y media a pura fiesta, no quedaron dudas que la banda conserva –a pesar del tiempo- esa mística alegre que tuvo siempre, con un estilo tan variado, como excelente, que solamente ellos, saben brindar, ojalá tengamos Cadillacs para rato, ya que “……por mas que quieran tapar/toda nuestra voz/nunca podrán, callar, esta canción……”.
Payasos trabajando estuvo en este importante show de rock a traves de: Fabián "jopito" Herrera y su famosa crónica.

No hay comentarios.: