Vean el regreso de Ozzy a los escenarios y junto a Tony Iommi

Podríamos decir los amigos inseparables, pero si uno se sumerge en la historia de la legendaria Black Sabbath fueron más las separaciones, disyuntivas, cismas y complicaciones las que unieron (que linda contradicción) a Ozzy Osbourne y Tony Iommi, el mensajero y el padre de esa oscuridad mitológica del Metal, en la voz y los riffs respectivamente, que al día de hoy sigue construyendo influencias hasta en los recodos más inimaginables de la música. 

Cuando uno lidia con la oscuridad de su ser está experimentando una división de sí mismo que tiene que ver con determinados programas mentales que vuelven desde nuestra infancia a pedirnos que lo resolvamos, que lo descubramos para poder dar libertad al alma y el Espíritu y así poder abarcar el aire del inconmensurable. 

Es en ese punto que estos dos músicos vuelven a encontrarse para seguir sanando pretéritos, fue en los Commonwealth Games que se llevan a cabo en Birmingham, Reino Unido. 

En esta parábola que contemplamos, el reencuentro con uno mismo.